sábado, 7 de mayo de 2011

Después de haber leído un libro de J. A. Marina

C.I. = 132. ALELUYAS DEL TALENTO

Para estar satisfecho y contento,
haz siempre uso de tu talento.

Las escuelas inteligentes
buscan la felicidad de las gentes.

Si tienes un niño listillo,
C.I., psicólogo ahí te pillo.

Y si no lo sabes tratar,
la vida te puedes complicar.

No sabía que era tan complicado
tener a un niño bien dotado.

Más vale ser un niño inteligente,
que un crío mal criado e indolente.

La escuela prefiere a los del montón,
que un niño inquieto y preguntón.

Para algunos pasar el WISC
es como bailar el twist.

El Raven parece muy facilón,
pero después se lían un montón.

A muchos, esto de los test de inteligencia
les parece algo que ya fue tendencia.


En la cuestión del talento
hay que andar con mucho tiento.

Por muchas vías se puede demostrar
que el talento lo puedes lograr.

Y no es cosa de un club exclusivista,
 cada uno tiene sus talentos como decía el biblista.

Para el presente no debemos educar,
sino para un mañana que humanizar.

El talento es para triunfar,
para una vida plena alcanzar.

Para en la vida alcanzar felicidad,
el talento nos ayuda con flexibilidad.

Más que a los test buscar solución,
preocúpate en vivir con emoción.

Hoy sabemos que hay muchas inteligencias,
lo comprueban ampliamente en las ciencias.

El mundo avanza que es una barbaridad,
las artes nos ayudan a mejorar como Humanidad.

En el ser humano siempre hay evolución,
poner en marcha los talentos es la solución.

De los deseos y premios, la ampliación e hibridación
son los mecanismos que permiten la educación.

Para vencer la dejadez y la apatía,
la motivación y el interés son la alegría.

Lucha contra la desgana y la pasividad
el maestro que pone ilusión y autenticidad.

Pone emoción y sentimientos
un proyecto educativo original sin miramientos.


Ponerse en el lugar de los demás es empatía,
educar con ilusión y esfuerzo es regalía.

Si no te quieres y no eres querido,
el aspecto educativo lo tienes perdido.

En la escuela, la investigación y el indagar
te ayudan a pensar y a progresar.

La mirada inteligente sabe mirar,
el oído inteligente sabe escuchar.

La razón sin emoción es paralítica,
la emoción sin razón es raquítica.

La libertad es un proyecto que la inteligencia inventa
y con la libertad la inteligencia está muy contenta.

En la educación la voluntad has de tener
y en ella, la voluntad es querer y poder.

Programar y evaluar para avanzar,
para que los niños el mundo puedan disfrutar.

En el interesante libro de José A. Marina
hay un filón de ideas como en buena mina.

Con La educación del talento
te quedas satisfecho y contento.


Germán Jesús Torres Sánchez

No hay comentarios:

Publicar un comentario